Sueños y deseos.

4:12am. Acabo de trabajar.
Otro hijo de puta menos en el mundo. Sin dudas, sin vacilaciones, sin piedad.

Me tumbo en la cama y pienso sobre lo que he visto: otro sueño de triunfo en base a drogas y prostitucion. Otro sueño de triunfo en base a pisar seres humanos. Otro sueño de triunfo en base a pisar otros sueños.

Y yo, como rey de los sueños en este caso me dedico a estropear ese sueño, y que curioso que en este caso eso es bueno.

Es bonito tener una meta, un sueño, un objetivo, un deseo; pero es algo que en esta vida es imposible. Muchos tenemos sueños y objetivos facilmente alcanzables: una vida tranquila junto a alguien a quien le importemos. Sacamos fuerzas para acabar con todo lo negativo de nuestra vida para poder alcanzar la tranquilidad, pero nos falla la segunda parte.
Y es que la humanidad esta hecha para sufrir, esta hecha para construir deseos que nunca se cumplirán, estamos hechos para llorar por las estrellas del cielo y anhelar la luna en la noche, estamos hechos para hartarnos de vivir y ansiar la muerte para que seamos inmortales y nunca nos llegue.
Como siempre, todo lejos de nuestras manos.
Como siempre:


Injusticia.